Entrevista a Ángel Sánchez (jugador del Alcorcón)

Ángel Sánchez: “Ojalá me toque jugar con el Alcorcón en Primera”.

Ángel Sánchez Martín, conocido simplemente como Ángel, es jugador profesional de fútbol. Ha desarrollado toda su carrera en Segunda División en equipos como el Alavés, el Ciudad de Murcia, el Levante y el Alcorcón. Ha conseguido dos ascensos a Primera, aunque no ha conseguido debutar en la máxima categoría porque cambió de equipo ambas veces.

La entrevista transcurrió en el banquillo del Alcorcón, el actual equipo de Ángel. El estadio de Santo Domingo (así se llama la casa del equipo amarillo) se encontraba vacío, pero acababa de albergar un partido una hora antes, por lo que en el ambiente se respiraba olor a fútbol.

Pregunta: Su signo del Zodíaco es Capricornio. Según la astrología, esto significa que usted hace muchos sacrificios para conseguir sus ambiciones. ¿Qué sacrificios ha tenido que hacer para llegar a ser un jugador consolidado en Segunda División?

Respuesta: Como cualquier futbolista bastantes, porque nadie te regala nada en este mundo. Por ejemplo, irme de casa a los 16 años. Ya llevo 14 fuera y estar lejos de tu familia y de tus amigos es lo más duro. Luego hay años difíciles en los que no juegas todo lo que te gustaría. Y también están las lesiones; que he tenido alguna que otra y es también duro pasar por eso.

P: Tras pasar por los juveniles del Real Madrid fichó por el Deportivo Alavés y jugó en sus filiales hasta que debutó con el primer equipo. Sin embargo, denunció al club por impagos en 2009. ¿Hasta qué punto fue duro denunciar al equipo que le dio la oportunidad de debutar en el fútbol profesional?

R: Esto ocurrió en mi segunda etapa en el equipo. En esta etapa teníamos un presidente que era un poco raro, tenía sus cosas y que hizo bastante daño en general a la institución en sí y a los propios jugadores, que dejó de pagarnos desde el mes de abril. Yo vivía fuera de casa, no estaba ganado millonadas y tenía que comer. Fue una situación en la que cualquiera hubiera hecho lo mismo, de hecho creo que lo denunciamos todos. Fue algo normal y creo que la afición así lo entendió. Incluso a día de hoy todavía estamos cobrando aquello. Ha sido un proceso largo, y lo que queda de él.

P: ¿Ha sido el momento más duro de su carrera?

R: Deportivamente sí, porque estuvimos a punto de descender. Este presidente hizo unas cosas muy malas para el club y en el vestuario veías a compañeros que lo estaban pasando mal porque tenían una serie de gastos como el colegio de sus hijos o una hipoteca. El hecho de no cobrar para mí no supuso tanto problema porque yo entonces no tenía hipoteca ni tenía familia. En esos momentos estaba centrado en salvar al equipo del descenso.

P: Otro de los equipos por el que ha pasado es el U.D. Levante. El año pasado fue uno de los equipos revelación en Primera y esta temporada también ha comenzado con buen pie. Usted que has estado dentro de ese vestuario, ¿podrías dar la clave para que un equipo tan modesto esté rindiendo a tan alto nivel?

R: Yo creo que el Levante puede ser para el Alcorcón un espejo donde mirarse. Era un club muy modesto. Cuando yo llegué, el equipo acababa de entrar en la Ley Concursal; sin embargo reunimos un grupo de gente a nivel humano muy bueno. Eso a la larga te hace rendir mucho mejor dentro del campo. La clave de este Levante es la humildad y el trabajo de todos los jugadores.

P: Su carrera siempre se ha desarrollado siempre en equipos que luchaban por el ascenso. Pero en 2010 fichó por el A.D. Alcorcón; un equipo recién ascendido desde 2ªB, que tenía el más bajo presupuesto de la categoría y cuyo objetivo sería mantenerse en Segunda. ¿Qué le convenció para dar ese cambio en su carrera?

R: Era un club modesto, pero muchas veces a un jugador lo que le importa es la naturalidad y la sencillez. Yo sabía que éste era un vestuario en el que no había malos rollos, el entrenador y los jugadores eran personas humildes… y todo eso al final te convence para fichar por un equipo. El hecho de estar cerca de mi familia también era importante: apenas a dos horas en coche. Me vienen a ver todas las semanas y yo también voy mucho a verles.

P: Ha conseguido dos ascensos a Primera División, uno con el Alavés y otro con el Levante, pero nunca ha podido debutar en la máxima categoría. ¿Cree que ese debut puede producirse con el Alcorcón?

R: La verdad es que cuando llegué aquí ni se me pasaba por la cabeza, pero hoy en día viendo cómo ha ido todo, cómo está creciendo el club haciendo las cosas muy bien… ¿por qué no pensar en que algún día va a jugar en Primera? En el Alcorcón hay un grupo humano fantástico y muy trabajador. Creo que este club tiene un gran futuro y se pueden hacer cosas importantes. Ojalá me toque a mí vivirlo.

P: Una curiosidad: ¿Es importante que el diseño de una camiseta (que sea bonita o no) le guste a un jugador para rendir luego en el terreno de juego o da igual?

R: No creo. Hay muchas supersticiones en esto del fútbol, pero eso de la camiseta no lo he visto. Con que sean cómodas es suficiente.

P: A raíz de esto: ¿Por qué se cambió el color del pantalón del Alcorcón de azul a amarillo en 2009?

R: Según me han comentado mis compañeros, les empezó a ir bien con el amarillo y siguieron con él hasta ahora. La cantera juega con pantalón azul, así que quizás el premio para los que consiguen llegar al primer equipo es ponerse el pantalón amarillo.

P: Y hablando de supersticiones, ¿tiene usted alguna manía antes de jugar un partido?

R: Yo ninguna. Me gusta jugar al fútbol-tenis en el vestuario antes del calentamiento en los partidos con algún compañero, pero no es superstición. Cuando no se puede me da igual.

P: ¿Un sueño por cumplir?

R: Jugar en Primera, desde luego. Y si es en el Alcorcón, mucho mejor.